La guerra comercial y tecnológica China-Estados Unidos nos afecta en exportaciones. Durante el primer semestre éstas estuvieron 6% bajo el récord de 2018 en el mismo período.
En el frente interno, incumbentes de todo tipo de negocios enfrentan a nuevos competidores: entrantes digitales y globales. Son ágiles y evolucionan rápidamente. Sus sistemas de inteligencia artificial les permiten conocer a cada usuario y ofrecerles lo preciso. ¡Hipersegmentación! Son fuertes. Se internacionalizan apoyados por inversionistas especializados en negocios digitales. Apple, Airbnb, Google, Netflix y Uber fueron financiados por venture capital (VC). En 2016 Softbank armó el Vision Fund con US$100 billones. Este fondo acaba de invirtir US$1.000 millones en Rappi.
Vemos que los canales de TV en Chile están compitiendo por audiencia con Netflix y por avisadores con Google, Facebook e Instagram. Los canales de TV están despidiendo personal. Dada la incertidumbre laboral, el consumidor chileno se contiene de comprar y el retail local se ve en problemas.
Debemos traer operadores especializados en venture capital, e incorporar know-how y know-who de la industria internacional, que lleva 73 años en esto
El mercado se nos ha venido complicando, tanto externa como internamente. Pero aún cuando el combate sea desigual, complejo y altamente incierto, nuestros incumbentes deben competir. Pero ahora habrán de competir innovando. Sin embargo, no basta con que Chile compita innovando en el mundo físico. También debemos potenciar a nuestras empresas en las lides digitales y globales. “Software is Eating the World” dice el homepage de Andreessen Horowitz, un prestigiado fondo de VC de California, que en su portafolio cuenta con 14 de los 390 unicornios digitales que hoy existen en el planeta.
La industria del VC nació en Chile hace 9 años. Hemos aprendido a invertir en negocios digitales. En 2018, Chile invertió US$220 millones en startups con potencial de crecimiento global. Debemos traer operadores especializados, e incorporar know-how y know-who de la industria internacional, que lleva 73 años en esto. Solo Israel invierte US$6.500 millones anuales en startups, tres veces más que toda América Latina. Los fondos VC estadounidenses invirtieron US$132 mil millones en 9.500 operaciones en 2018. Debemos aprender de los mejores VC del mundo y duplicar nuestras inversiones en negocios digitales. Ganaremos en nuevas exportaciones intensivas en innovación; en más exportadores de más ciudades de Chile; en mejores empleos y en mayor retorno del capital invertido. Podemos hacerlo. ¡Debemos hacerlo!
Columna publicada originalmente en El Mercurio