Las máquinas pueden ser inteligentes, pero son compañeras bastante aburridas. Google ya está al tanto y, a medida que construye su recientemente anunciada tecnología de asistente personal Google Assistant, la compañía está ansiosa de hacer la inteligencia artificial mucho más personal y amigable, destaca Fast Company. ¿Cómo? Lanzando a artistas a resolver este problema.
Ryan Germick, quien dirige el equipo de Google Doodle en Mountain View, ahora está trabajando en la adición de un toque humano a Google Assistant junto con Emma Coats, una artista independiente más conocida por su paso como una ‘artista de historias’ en Pixar y a la vez autora de una lista viral de 22 reglas de storytelling.
Google Assistant es una nueva forma de abordar el concepto de ‘asistente personal’ desde la inteligencia artificial, concepto que se construirá en los productos de Google, como el próximo Google Home speaker. Al igual que Siri y Alexa, Google Assistant tomará la forma de una interfaz conversacional, en lugar de algún tipo de robot humanoide, al menos por ahora. Para hacer estos intercambios persona-máquina más agradables, Google está aprovechando a creativos como Germick y Coats para inyectar algo de humor y la inteligencia de narración en las conversaciones.
“Dado que Google Assistant está ‘allá afuera’ y la gente puede decirle cualquier cosa, es que debemos crear el personaje más ‘redondo’ que hayamos construido”, explica Coats a Fast Company. Una de las cosas en que estamos trabajando es cómo hacer que sea un asistente con el que uno se pueda identificar fácilmente. ¿Qué y cómo piensa el personaje sobre sí mismo para que tú te puedas identificar? ¿Cómo fue la infancia del personaje?”. El decirle personaje a Google Assistant no es casualidad, sino que corresponde a la personalidad que Google le imprimirá a la inteligencia artificial en un futuro muy próximo.