Hace unos meses, la Ford Motor Company presentó su nuevo sedán Fusion y su potente camioneta F-150 Raptor en el Salón del Automóvil de Detroit. Pero las resplandecientes chapas metálicas y los rugientes motores fueron eclipsados por el anuncio de la empresa de un paquete de “servicios de movilidad”. Estas ofertas incluyen el uso y la propiedad compartida de vehículos, reservas de aparcamiento, enrutamiento multimodal, pequeños establecimientos de venta y una app del estilo de iTunes para proporcionar acceso a estos servicios, informa MIT Technology Review.
El anuncio de Ford se ha producido una semana después de que General Motors (GM) anunciara que invertirá 500 millones de dólares en Lyft, el servicio de transporte compartido bajo demanda. Posteriormente, GM también hizo público que adquirirá los bienes de Sidecar, un negocio de transporte compartido que cerró sus operaciones el 31 de diciembre. De hecho, casi todas las empresas automovilísticas están desarrollando planes de acción contra el auge meteórico de Uber y Lyft. Y también para evitar convertirse en tan sólo proveedores de hardware de movilidad.
“Nos encontramos en un punto de inflexión donde la tecnología está haciendo posible cosas que no eran posibles antes”, afirma el vicepresidente de Investigaciones e Ingeniería Avanzada de Ford, Ken Washington. “Uber demostró al mundo que puede ayudar a la gente a llegar a donde quieren ir”, añadió. El responsable hacía asi referencia a que los coches de propiedad privada perderán importancia con el tiempo.
Lee la noticia original en MIT Technology Review